Banner

domingo, 5 de mayo de 2013

El perro me olisquea y se va. Es tradición.


El perro me olisquea y se va. Es tradición.
Yo sé que me aprecia
pero huelo, en su presencia
el aroma de la traición.

Noto cómo sus pasos
son medidos y certeros
que nada deja al azar,
que nada y no se ahoga
a pesar de ser perro.

El perro me olisquea y se va. Es tradición.
Que me siento en tensión todo el día
y eso no es bueno para mi sintonía
con mi amada y yo entre mi vida.

Quiero desaparecer antes
de hacerlo más grande, el hueco
el daño que te he hecho…
Lo siento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.