El último camino

Key se había despertado repentinamente. Sentía mucha calor, sin embargo, no tenía ni una gota de sudor en ninguna parte. Una sensación de... calor abrasador interior se había apoderado de él. Fue rápidamente a su nevera. El panorama de ésta era bastante... gracioso.

No había nada apenas. "Mañana al super... otra vez."

Cogió un vaso de leche e intentó dormir. Pero no podía. Ese sentimiento... ese calor seguía inundándole por completo.

¿Por qué...? ¿Qué pasa?

No lo sabía, no tenía ni idea. Simplemente, sabía que era doloroso... pero que no lo mataría.

Se terminó el vaso de leche, y cuál fue su sorpresa...

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Frío.

Mucho frío.

Soledad. Melancolía.

"Necesito música. Ya."

Se fue directamente hacia la cadena de música. No era una cadena cualquiera, digamos... que tenía una radio integrada. Una radio con todos los discos de muchísimos grupos de música. No era legal, obviamente. Esa pequeña modificación fue hecha hace muchísimo tiempo por un antiguo amigo suyo, uno de los muchos que desapareció... O, al menos, ya no recuerda.

Empezó a trastear. Lo puso en modo aleatorio, pero ya sabía qué iba a salir...

"Ohne dich kann ich nicht sein,

ohne dich!
Mit dir bin ich auch allein,
ohne dich!
Ohne dich zähl' ich die Stunden,
ohne dich!
Mit dir stehen die sekunden,
Lohne nicht,
ohne dich!"

Por la ventana entró una corriente de aire frío que le espabiló. E hizo que no durmiera en toda la noche...

Sin ti.